La empresa Aerolíneas Argentinas operada calamitosamente por el grupo español Marsans, la ineficacia absoluta de los entes reguladores y la existencia de varios gremios combativos en una misma compañía, produjeron como resultado la bancarrota técnica de la línea de bandera y, en lugar de que se produzca el desenlace lógico de semejante desaguisado el gobierno decide su estatatización, debiendo hacerse cargo de una colosal deuda, a la que se le deben agregar los costos operativos mensuales.
El 91% de la población de nuestro país no viaja regularmente en avión, pero con sus impuestos deberán subsidiar al 9% restante que surca los cielos de norte a sur y de este a oeste.
Nuevamente el estado se hace cargo de una deuda originada por un privado. De los niños que inexplicablemente se mueren de desnutrición, en el tercer productor mundial de alimentos, no se ocupa absolutamente nadie; el gobierno dice defender a los pobres, pero con sus desastrosas políticas ocasiona un escandaloso incremento de la inflación, que probablemente supere este año el 25%, elevando significativamente el número de individuos por debajo de la línea de la pobreza e indigencia, a razón de 125.000 almas por cada punto de incremento del costo de vida.
Con las palabras pueden llenarle la cabeza a varios, pero la billetera a nadie y mucho menos el estómago. Por favor no mientan más.
1 comment:
Me peguçe una vueltita, muy bien ehª Un abrazo, Juan Pablo Peralta
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