Una obra maestra de ingeniería

Hay algunas personas que creen que el hombre en realidad no llegó a la Luna, sino que fue una simulación para intentar engañar a la humanidad con fines propagandísticos. Tanta ingenuidad por parte de esa gente es difícil de creer, lo más probable a mi entender, es que sea un intento deliberado teniendo como objetivo la venta de libros y vídeos con información absolutamente falsa con fines económicos, aunque no puedo descartar una finalidad política.

El programa Apollo que tuvo por misión llevar al hombre a la Luna, fue una obra maestra de ingeniería que pudo ser realizada por el aporte entre otros, del científico alemán Werner Von Braun, quien diseñara el formidable cohete Saturno V, sin el cual hubiese sido imposible colocar en órbita una nave de semejante peso.

Los nuevos supertelescopios están en condiciones de identificar a las unidades de descenso de las naves que llegaron a la Luna, recordemos que cada módulo lunar constaba de dos partes, una de ellas despegaba para que al entrar en órbita se acoplase a la nave madre y posteriormente iniciar el regreso a la tierra.

Cuando los astronautas realizaban sus tareas sobre la superficie lunar, las comunicaciones que mantenían con el centro de control situado en la ciudad de Houston, Estados Unidos, podían ser recepcionadas también por otros países, que tuvieran la tecnología adecuada, por lo tanto determinar el punto de emisión de dichas señales es sumamente fácil, y es completamente imposible que se haya podido engañar de una manera tan elemental a la totalidad de la comunidad científica internacional.