Crecimiento y desarrollo

Mucha gente cuando habla de economía comete el error de confundir crecimiento con desarrollo. Crecimiento es el incremento del producto interno bruto, el cual también puede ser negativo, mientras que el desarrollo implica una mejora en la calidad de vida de la población.

En los últimos años en América latina y otras regiones del mundo se ha venido dando el fenómeno una mejoría en algunos casos significativa de ciertos índices económicos, pero lo paradojal fue que esos resultados, parciales por cierto, no tuvieron mayores efectos en la gran cantidad de pobres e indigentes los cuales fueron aumentando año tras año.
Un error muy grave cometido en Argentina durante mucho tiempo, fue tener un déficit presupuestario crónico, lo que se intentaba compensar con emisión monetaria, posteriormente con el resultado obtenido de la privatización de varias empresas públicas, y por último con endeudamiento externo, hecho de una gravedad inusitada debido a que se produjo un aumento sideral de la deuda, hasta que se llegó a la apresurada decisión demagógica por cierto, de caer en cesación de pagos.

Es de esperar que la dirigencia Argentina aprenda de los errores cometidos, y tenga en cuenta que es fundamental para la salud de la economía mantener disciplina fiscal, es decir, no gastar más de lo que se recauda, y una política monetaria acorde a las circunstancias, para ser más preciso, no emitir papel moneda sin respaldo.La hiperinflación, la recesión y la caída del poder adquisitivo de los salarios son tristes hechos , los cuales pueden volver a ocurrir, si no se procede de manera racional y no se capitalizan las experiencias negativas tras largos años de políticas populistas, aplicadas por aquellos que decían defender a los más necesitados, cuando precisamente por ellos mismos el número de pobres se ha incrementado.